Durante más de un siglo el Palazzo Medici-Riccardi fue la residencia principal de la poderosa familia Medici, que gobernó sobre Florencia. Los patios, el jardín y varias salas del palacio están abiertos para los visitantes y son maravillas que te recomiendo. Apúntatelo para tu próxima visita a Florencia.
La construcción del palacio fue encargada por Cosimo El Viejo, un banquero que gracias a su riqueza e influencia se convirtió en el gobernante de facto de Florencia. Un primer diseño para el palacio obra de Filippo Brunelleschi fue rechazado porque se consideró demasiado suntuoso. Te digo, que a Cosimo no le gustaba mostrar su riqueza y solía cultivar una imagen de sobriedad. Por lo tanto, optó por un diseño de aspecto más modesto, el de Michelozzo di Bartolomeo.
La construcción comenzó en 1444 y en 1459, antes de que se completara, Cosimo El Viejo se instaló en el palacio. Pero el banquero, murió cinco años después y nunca vería terminado el edificio. Su hijo Piero y su nieto Lorenzo El Magnífico sí que lo disfrutaron, embelleciendo los interiores.
En 1494, durante una insurrección republicana de corto recorrido, el palacio fue saqueado. Cuando los Medici regresaron al poder en 1512, volvieron a instalarse en el palacio. En cualquier caso, en 1539, la familia Medici se mudó, primero al Palazzo Vecchio y una década más tarde, en 1549, al Palazzo Pitti, al otro lado del río.
Más de un siglo después, en 1659, Ferdinando II de Medici, el Gran Duque de Toscana, vendió el Palazzo Medici-Riccardi a Gabriello Riccardi. La familia Riccardi amplió y renovó el palacio en el estilo renacentista original y decoró el interior en un barroco que sí era contemporáneo. Cuando la familia Riccardi entró en decadencia, se vieron obligados a vender el palacio y finalmente se convirtió en propiedad del gobierno.
Detalles
De acuerdo con la preferencia de Cosimo, la fachada del Palazzo Medici-Riccardi a lo largo de la Via Cavour es bastante austera. La planta baja tiene bloques de piedra de aspecto rústico. Las piedras del primer piso son menos ásperas, mientras que las del piso superior son completamente lisas. Los dos niveles superiores tienen un patrón repetitivo de ventanas de arco redondo, algunas de las cuales son ciegas. El edificio está coronado con una cornisa muy visible.
El palacio se convirtió en un ejemplo, un molde, un modelo, para los nuevos palacios en Florencia, y como resultado ahora se ve similar en apariencia a muchos otros.
Pero hablemos de los patios. Un pequeño corredor conecta el Patio de las Mulas con el patio principal, conocido como el Patio de Michelozzo o Patio de las Columnas. Este elegante patio está rodeado por una galería clásica. El friso sobre la arcada está decorado con medallones que muestran alternativamente el escudo de armas de los Medici y figuras clásicas. Cosimo tenía un gran interés en la antigüedad. Éso queda claro a la vista.
En el patio, una vez existió una fuente con la estatua de David de Donatello, ahora mostrada en en el Bargello. En su lugar, podrás ver una estatua de Orfeo, de Baccio Bandinelli.
Detrás de la estatua de Orfeo está la entrada al jardín del palacio. Una vez estuvo adornada con varias estatuas que ahora están en los Uffizi y el Palazzo Pitti. Hoy se puede ver un jardín florentino típico con limoneros en macetas y una pequeña fuente. En un lado, hay una estatua de Hércules y frente a una limonaia, un invernadero para limoneros.
Interiores
El palacio puede parecer modesto en el exterior, pero el interior está profusamente decorado con tapices y frescos. Las habitaciones más interesantes que pueden ver los visitantes están en el primer piso, comenzando con la pequeña capilla de los Reyes Magos. La capilla tiene un hermoso piso de mármol y un techo dorado diseñado por el maestro Michelozzo.
Las paredes de la sala principal fueron magníficamente decoradas en 1459 por Benozzo Gozzoli, cuyos frescos representan la procesión de los Reyes Magos. Varios miembros de la familia Medici, así como el propio pintor, aparecen retratados en la procesión. Un dato, el retablo de Filippo Lippi es una copia; el original fue vendido y ahora se encuentra en la Gemäldegalerie de Berlín .
Una escalera conduce desde la capilla a la Sala de las Cuatro Estaciones. Se trata de una sala del consejo que está decorada con tapices florentinos que representan las estaciones. En las paredes de la habitación contigua, la Sala Sonnino, hay una serie de bajorrelieves antiguos que representan, entre otros, al héroe mítico Hércules. Pero la obra más famosa de la sala es la pintura de Madonna y el Niño de Filippo Lippi de alrededor de 1466.
La siguiente sala, la Galleria di Luca Giordano, es la más suntuosa de todas. Fue construida en la década de 1770 para Gabriello Riccardi y está abundantemente decorada con motivos barrocos con mucho estuco dorado, paneles de madera y un grandioso fresco del techo pintado por Luca Giordano. El fresco, que se extiende a lo largo de la habitación, representa la ‘Apoteosis de la dinastía de los Medici’.
En la planta baja del Palazzo Medici-Riccardi, también se puede visitar algunas salas de exposición utilizadas para muestras temporales. Una de las salas alberga una colección de esculturas romanas adquiridas por Riccardo Riccardi. También hay un laboratorio multimedia, donde los visitantes pueden acceder a informaciones detalladas sobre la Capilla de los Reyes Magos tocando en una pantalla multimedia.
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Palazzo Medici-Ricardi
